lunes, 14 de marzo de 2016

Una mirada al pasado de nuestra hermosa capital

Caracas no ha crecido solo en términos de población, sino también en lo que se refiere a estructuras significativas


Venezuela cambió mucho durante el siglo pasado, en especial la ciudad de Caracas. Siempre es bueno recordar cómo era nuestra hermosa ciudad y la forma en la que paulatinamente se transformó en una metrópolis. Algunos de nuestros visitantes recordarán ciertos lugares, otros se sorprenden cuando ven la vieja Caracas por primera vez en fotografías.

A continuación, lugares y estructuras que han dejado una huella, a través de los años, en nuestra querida ciudad:

Universidad Central de Venezuela 


·         UCV: la sede inicial de la universidad era la capilla del Colegio Seminario Santa Rosa y lo fue hasta 1786, año en el que es trasladada al convento de San Francisco. Allí permaneció hasta 1953, cuando ocurre la mudanza a la Ciudad Universitaria de Caracas.

Bajo el mandato del presidente Isaías Medina Angarita, el gobierno sintió la necesidad de pasar la universidad a un lugar más grande y moderno. Por ese motivo, compraron la Hacienda Ibarra y le asignaron la responsabilidad del diseño principal al arquitecto Carlos Raúl Villanueva.

El nuevo campus se convirtió en un gran complejo urbano de aproximadamente 200 hectáreas que contaba con un total de 40 edificios. La Ciudad Universitaria de Caracas fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y es el único campus de una universidad moderna diseñado por un arquitecto.

·         Hotel Humboldt: ubicado en la cima del cerro El Ávila, en Caracas, el edificio se encuentra a una altura de 2.150 msnm. Es una estructura cilíndrica que ofrece una vista de 360°, tiene una altura de 59,5 m y cuenta con 19 pisos, distribuidos en 1 sótano, 1 área de servicios, 2 salas de estar, 14 pisos que albergan 70 habitaciones y un mirador desde el cual se pueden apreciar ambas ciudades (Caracas-La Guaira).

El edificio, además, estaba dotado de un comedor y unas estructuras adosadas en las cuales se encontraban las áreas sociales del hotel: salones, dependencias administrativas, servicios y piscina cubierta. La fachada de cristal se utilizó para propiciar el calentamiento de la edificación.


La obra la completaban los dos tramos de teleféricos que unían el edificio con Caracas (estación Maripérez) y la ciudad de La Guaira (estación El Cojo), además de una pista de patinaje sobre hielo y múltiples restaurantes. 

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